En la era de la bomba atómica y la Guerra Fría, la Hora del Apocalipsis fue diseñada como una forma de llamar la atención sobre el hecho de que las acciones humanas podrían desencadenar un desastre planetario.
Las amenazas a la humanidad incluyen acciones para la proliferación de armas nucleares, la crisis climática y el aumento de las armas biológicas.
«La hora del Apocalipsis se mantiene constante en 100 segundos hasta la medianoche. Pero eso no significa buenas noticias”, dijo Sharon Squassoni, copresidenta del Atomic Science Bulletin.
Dijo que los expertos habían concluido este año que la humanidad estaba «atrapada en un momento peligroso que no trae ni estabilidad ni seguridad», en medio de la pandemia de COVID y la continuación de algunos países para desarrollar sus programas nucleares. Un contrapeso para mantener el reloj en marcha es la extensión del tratado New Start sobre control de armas entre Rusia y Estados Unidos y el compromiso de la nueva administración de la Casa Blanca para responder a la emergencia climática.
“El hecho de que tengamos programas activos de armas biológicas en Rusia y Corea del Norte, con China e Irán a poca distancia de ellos, debería darnos que pensar. Estamos al borde de un cataclismo biológico”, dijo Asha M George, directora ejecutiva de la Comisión Bipartidista de Bioseguridad.
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